Neko

February 11, 2006

La generación disfórica...



¿Se han dado cuenta?

Los que tenemos entre 18 y 30 años somos de una forma especial. Somos, de alguna forma, la generación que se resignó, que ya no creyó en "cambiar el mundo". No quiero generalizar, porque obviamente hay personas que no son como lo que estoy describiendo, obviamente todavía hay gente que sueña y que cree con mucha fuerza que sus sueños se harán realidad. Tampoco pretendo hacer de este un post melancólico, quejumbroso o depresivo. Sólo trato de buscar, en mi historia y en la de mis coetarios, el porqué de esto que pasa y que leo en muchos blogs y fotologs.
Tenemos, tal vez, una "morfología" común al comunicar lo que sentimos; no lo hacemos ni agradados ni desagradados, nos descargamos virtualmente para sentirnos realmente aliviados. Es más fácil, nadie nos mira ni nos ve llorar, podemos fingir ser lo que no somos o lo que deseamos ser sin ser necesariamente descubiertos. Si llegamos a tocar la realidad y hacer de nuestras descargas algo "en vivo y en directo" es con poca gente, es con las personas con las cuales te sentías más comoda en la virtualidad. O sea, la virtualidad se hace realidad.
La música, crecimos entre un depresivo Grunge, que abarcaba toda la agresividad de Nirvana, la melancolía de Pearl Jam, lo común de Stone Temple Pilots, Sound Garden y su The Day I Tried To Live o su Just Like Suicide.
Vimos cómo el mundo se conmocionó con el suicidio de Kurt Cobain, un ícono de nuestra generación...lloramos tanto como lloraron nuestros padres a John Lennon. Vimos y repudiamos a Courtney Love por el (mal)trato a su hija, por el consumo inescrupuloso de drogas y por dejarla abandonada.
Los sueños, muchos los perdimos, nos resiganamos a que el mundo ya es como es y nosotros no lo vamos a cambiar, tal vez podamos hacer un entorno mejor y más agradable, pero es lo que hay (esa frase, tan de nosotros). Envidio a esos que decidieron que sí podían cambiar el mundo, esos que sí creen que los sueños se hacen realidad (porque creo que todos soñamos, distinto es creer que se hará realidad).
Los dibujos animados: Candy, Lady Oscar, Robotech, todas historias de amor con una gran carga de sufrimiento. Remi, Marco, dolorosas separaciones pero muchísimos esfuerzos por ser felices.
Marilyn Manson, el culpable de todas las masacres escolares y los suicidios...no sabían que Manson estaba a veces al interior de los hogares y los colegios, que el cantante sólo critica lo que sabe que pasa en muchas partes.
Las muertes, los accidentes automovilísticos, los suicidios de amigos queridos, de esos que perdieron finalmente todas las esperanzas...ojalá que se encuentren en un lugar mejor, en el lugar que soñaron sería el cielo.
La familia, vivimos la era de las familias disfuncionales: más separaciones que matrimonios; sale a la luz la violencia intrafamiliar, incluyendo la violencia sexual y psicológica. Por fin entendieron que NO es siempre NO aunque se lo digas a tu pareja, que no tiene ningún poder sobre ti, que no te puede tocar....que no puede hacerte daño con actitudes, con palabras o con golpes...que NADIE tiene derecho a destrozarte la vida, que sólo por el hecho de vivirla ya es difícil.
El sexo, mujeres tardías y hombres precoces. Mucha eyaculación precoz y mucha pérdida del placer y el deseo. Stress, depresión, fármacos, drogas, alcohol...es como el cáncer, todo afecta la eficacia en la cama (o en la cocina, en el baño, en la tina, en el agua, en la playa, en el comedor, la alfombra, el sillón, el campo y todos los los lugares potencialmente "usables").
El amor, amores platónicos, imposibles, posibles y dolorosos. Amores complicados, tristes, felices. Amores llenos de amor, de violencia, de falta de amor (oh sí, la histórica guerra entre el amor y el desamor). Amores poéticos, fabulosos y metafóricos. Amores que duelen y otros que te hacen feliz, correspondidos y no correspondidos. Me imagino que en este tema la historia se repite generación tras generación...la diferencia es que nosotros podemos elegir a quien amar y a quien no, podemos elegir si queremos tener un hijo o no, si lo criamos solas o de a dos.
La indesición, no sé ustedes (los que leen), pero a mi me cuesta hasta elegir el helado que quiero.
"No soy fanática de nada"... eso contesto cuando me preguntan qué es lo que más me gusta. No hay una banda que me guste tanto como para llorar; no hay un hombre que me guste tanto como para sufrir (eso es hoy, 11 de febrero de 2006, puede ser que mañana, 12, esté llorando por alguien); no hay nada que me motive, que me entretenga realmente; no tengo una película favorita, ni un género ni un actor ni una actriz...no soy fanática de nada.
He leído varios blogs y de verdad que en muchos de ellos me siento reflejada por la forma de expresarse que tienen esas personas. Hay cosas, estados, en común, hay formas de vivir la vida, de sentirse y de sorprenderse que son comunes...
Es bueno saber que hay más gente que a veces se siente como a veces me siento yo.

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